Pautas para aprender a comer menos

Uno de los motivos por los que la gente no tiene el peso que desea, es porque comen más cantidad de alimentos de lo que necesita su organismo.

Y no es de extrañar que suceda esto, las porciones excesivas tanto para las comidas como para las bebidas están de moda, y se han convertido en una norma más que en una excepción.

Cuando vamos a un restaurante o a un cine las raciones que nos sirven son 2 e incluso 3 veces la cantidad normal que necesitamos, y en algunos sitios además puedes pedir toda la bebida carbonatada que quieras que solo te cobrarán la primera.

Veamos cómo podemos corregir esta situación.

Pautas para aprender a comer menos

Destierra la idea de que hay que comer todo lo que hay en el plato

Debes de dejar de comer tan pronto empieces a notarte lleno.

Muchos padres obligan a sus hijos a comer todo lo que hay en el plato sin respetar la saciedad de esos niños, y esto es un error.

Luego con edad adulta seguimos aplicando la misma teoría, lo que nos lleva a comer más de lo que nuestro cuerpo nos pide.

 

Come despacio

Para que tu cerebro interprete que le está llegando comida al estómago y que ya está lleno, debe pasar cierto tiempo, si comes muy rápido tus receptores no tienen tiempo de transmitir esta información al cerebro, de modo que comerás más cantidad de calorías de la que necesitas.

Mastica y saborea cada bocado que entra en tu boca, habla con la persona que está a tu lado, pregúntale a tus hijos cómo les ha ido en el colegio, etc.

Si empiezas a comer por los alimentos más saludables y con menos calorías cuando llegues a los más calóricos, que suelen ser los segundos platos, tus receptores ya estarán actuando, te saciarás antes y comerás menos cantidad de los alimentos que más calorías aportan.

 

No sirvas los platos al centro, sírvelos de forma individual

Un error muy común que se produce a la hora de la comida es poner la fuente de ensalada, verduras, carne o pescado en el centro de la mesa para que cada uno se sirva lo que quiera.

Debemos servir los platos de forma individual para alcanzar 2 objetivos: por un lado debemos ser conscientes de la ración que nos estamos comiendo y por otro lado si no hay una fuente donde repetir, porque todo lo que me tengo que comer está en mi plato, no puedo aumentar mi ración de comida.

 

No comas viendo la televisión, leyendo el periódico o trabajando

Tienes que comer siempre en el mismo sitio de la casa.

Si comes mientras trabajas, cada vez que te sientes a trabajar sentirás deseos de comer aunque no tengas hambre, ya que estás acostumbrando a tu cuerpo a ello.

Debes ser consciente de lo que comes si estás distraído con algo que te capte mucho la atención, como puede ser la televisión o el periódico, no sabrás lo que estás ingiriendo.

Juega con el tamaño de los platos

Debemos utilizar platos grandes para alimentos que aporten pocas calorías pero que sean ricos en vitaminas, minerales y fibra como son las verduras y las hortalizas mientras que para las legumbres, el pescado, la carne, el tofu, el tempeh o la soja texturizada debemos utilizar platos más pequeños. Las personas tendemos a llenar el plato de comida, si este es pequeño la ración será menor.

 

 Come fruta o verdura para terminar de saciarte

Si después de comer una ración adecuada todavía tienes hambre, porque estás acostumbrado a comer mucho, come algo bajo en calorías como una fruta o verdura fresca tipo zanahoria, pimiento rojo, tomates cherry, etc.

Igual que has acostumbrado a tu estómago a comer mucho para sentirte saciado, ahora te toca enseñarle a saciarse con muchos menos alimentos.

 

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