Cuando se vuelve al trabajo los horarios cambian y con ellos debemos reajustar las necesidades de alimento y de insulina. Si no se reajustan bien puedes sufrir hipoglucemias o hiperglucemias.
La diabetes llegó a mi vida en el mejor momento, recién empezadas mis vacaciones (tenía 3 meses), lo que me permitió adaptarme muy bien al manejo de la insulina, la dieta, controlar los pesos, conocerme a mí misma….pero cada vez se acerca más el momento en el que voy a comenzar a trabajar, y me preocupa cómo me voy a adaptar, si mis glucemias irán controladas.
¿Qué ocurrirá con mi glucemia cuando empiece a trabajar?
Hasta ahora, me levanto a las 9:00, desayuno y a las 12:00 o 12:30 tomo una ración o una ración y media en fruta o yogur, sin necesidad de insulina, y llego perfecta a la comida.
Pero cuando comience a trabajar madrugaré más, a las 7:00 en pie, y hasta las 15:00 no comeré, por lo que tengo muchas horas que tengo que manejar para evitar hipoglucemias, tampoco pasarme comiendo para no tener hiperglucemia, y mi miedo es ponerme insulina a media mañana, pues nunca necesito para almorzar, y no conozco bien mis necesidades en esa hora del día.
¿Qué cambios he hecho en el desayuno?
A falta de 3 semanas para comenzar a trabajar, estoy levantándome ya a las 7:00 para ir ajustando comidas.
Una opción era desayunar allí en el trabajo, a las 8:30-9:00, para seguir el mismo horario que hasta hora, pero esto no me ha dado resultado. Estar tanto tiempo sin comer y sin insulina a esas horas del día, me eleva la glucemia por la elevación de hormonas contrarreguladoras, por lo que he visto que desayunando nada más levantarme, mi glucemia va mucho mejor.
El resto de la mañana la sigo de la siguiente manera: a las 3 horas del desayuno tomo 2.5 raciones (las suelo gastar en pan), y 3 horas después 1.5 ración en fruta.
Esto es algo ajustado individualmente, es mi caso, y nunca se podría generalizar.
¿Cuál es el objetivo de este post?
La conclusión y el objetivo de este vídeo, es hacer llegar que cada uno debe conocerse, y dependiendo tanto de su apetito, su actividad física y su resistencia a la insulina, ajustar las necesidades tanto de alimento como de insulina.
Vídeo en el que la Dra Lydia Serrano explica a través de su experiencia personal, cómo ha ido adaptando las comidas al trabajo.
Lecturas relacionadas:
