Qué es el acné

¿Qué es el acné?

El acné es una de las enfermedades inflamatorias más frecuentes de la piel

Es una condición que afecta a la mayoría de la gente en algún momento durante sus vidas. Es frecuente en la adolescencia, aunque también puede afectar a niños y a personas mayores.

Aunque todos hemos oído hablar del acné, te vamos a explicar algunas cosas de esta condición que te ayudarán a entender mejor porqué se produce y qué es lo que no debes hacer si no quieres que queden cicatrices.

Qué es el acné

Afecta al folículo pilosebáceo

El acné se produce por el taponamiento del folículo pilosebáceo, justo en el orificio de salida a nivel de la epidermis.

Se tapona por un aumento de la queratina o por otros factores.

¿Qué es el folículo pilosebáceo?

Básicamente es el pelo con la raíz, en la parte más profunda del pelo, y una glándula sebácea, que es la que produce el sebo que sirve para proteger la piel.

Por un mismo orificio sale el pelo, y rodeándolo esa secreción o grasa. En condiciones normales, no patológicas, esta grasa sirve para defendernos de agresiones externas.

 

¿Cómo se forma el acné?

Por el orifico por donde sale el pelo y el sebo o grasa se produce un taponamiento.

Si esto se asocia, como ocurre con frecuencia en la adolescencia, con un exceso de grasa como consecuencia de los cambios hormonales asociados a esta etapa, se acaban formando pequeños quistes de grasa.

Cuando estos pequeños quistes de grasa se infectan, por ejemplo cuando los pellizcamos, es cuando aparecen los típicos granos rojos, que pueden doler y/o tener pus, y que pueden dejar cicatrices.

 

¿Existen distintos tipos de acné?

El acné vulgar es la forma más común de acné. El acné vulgar puede ser:

  • Acné no inflamatorio

El acné empieza siempre siendo no inflamatorio. Son los típicos puntos blancos o negros que podemos encontrar habitualmente en muchos niños y niñas a partir de los 10-11 años.

Los puntos blancos son pequeños miniquistes de sebo y queratina. El folículo o poro está taponado, no llega el oxígeno, y ahí está el sebo con el color blanquecino-amarillento normal. Son los comedones cerrados o espinillas.

Cuando por la propia presión o por una pequeña fricción se quita ese pequeño tapón que hay en la superficie del folículo, entra el oxígeno y se produce oxidación (como lo que le ocurre a una manzana al pelarla). Entonces aparece el comedón abierto o comedón negro. Es lo que todos conocemos como puntos negros.

Tanto el punto blanco como el punto negro son no inflamatorios, y no dejan cicatriz.

  • Acné inflamatorio

Es el tipo de acné más preocupante porque puede producir cicatrices o marcas para toda la vida.

Si en los puntos blancos o negros de la piel penetran bacterias, pueden tener un caldo de cultivo, y acabar provocando una infección. Es lo que correspondería a los típicos granos, rojos que pueden doler. Es cuando aparece pus.

Cuando manipulamos o pellizcamos los puntos blancos o los puntos negros se favorece la infección.

El acné conglobata es una de las formas de acné más graves que existe.

Aparecen lesiones generalizadas, en las que los quistes de grasa se rompen, y se comunican entre sí dando lugar a trayectos fistulosos, provocando una reacción del organismo que genera una respuesta inflamatoria muy exagerada.

Se pueden llegar a producir incluso reacciones granulomatosas y generar cicatrices bastante profundas de por vida.

 

 

En el siguiente vídeo, el Dr. Jorge Martínez explica al Dr. Juan Madrid qué es el acné:

 

Lecturas relacionadas:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Podría
interesarte

Scroll al inicio